Hoy en día el feedback se ha convertido en un concepto clave para cualquier empresa. Principalmente porque tanto los colaboradores como los clientes ya no tienen una relación pasiva frente a los productos y servicios de las empresas.
Es la opinión que tienen nuestros clientes, o posibles clientes de nuestra empresa, producto, servicio o campaña de publicidad. Comunica su nivel de satisfacción. El feedback puede ser positivo cuando nuestra empresa ha logrado satisfacer las expectativas del consumidor o incluso mejorarlas, pero también negativo con decepciones, reclamos y quejas.
Es una gran oportunidad para detectar errores y áreas de mejora.
Proporciona importantes ventajas frente a la competencia.
Ayuda a fidelizar clientes y conseguir nuevos.
Permite corregir fallos de todo tipo: de logística, técnicos, de atención al cliente,etc.
Transaccional: implica la solicitud de evaluaciones poco después de la compra.
Páginas web interactivas: estos materiales ofrecen recursos directos para que los visitantes indiquen sus preferencias, respondiendo preguntas, eligiendo opciones y evaluando alternativas.
Redes sociales: siempre es importante dar respuestas rápidas; tratar cada demanda de forma individualizada y estimular las participaciones.
Emails: es un medio donde la comunicación es directa y puede hacerse de forma personalizada.
Investigaciones: con los resultados es posible tener una visión más clara sobre la percepción de los clientes sobre la marca.